La II Marcha del Vehículo Eléctrico en Madrid ha vuelto a reunir por segundo año consecutivo, no sólo a los que acudieron con su vehículo para apoyar la movilidad eléctrica, sino también a diferentes agentes de la industria, fabricantes incluidos.
Hemos tenido la oportunidad de charlar posteriormente con el presidente de la Asociación Madrileña del Vehículo Eléctrico (AMVE), Javier Blanco, que nos ha apuntado que la convocatoria rozó el centenar de vehículos impulsados por motorizaciones eléctricas. Por otra parte, la nota más negativa la pusieron las autoridades de la ciudad, ausentes y sin respaldar una iniciativa fundamental para el futuro de la movilidad en grandes urbes.
Blanco ha querido poner de relieve el gran esfuerzo que realizaron, por ejemplo, la compañía de soluciones energéticas Remica, que aportó más de una docena de eléctricos a la marcha; de algunos fabricantes que se dieron cita o apoyaron, como Renault; y de, en general, de todos los allí presentes. Por las calles de Madrid pudieron verse circular algún que otro Tesla Model S, e incluso un Kia Soul EV, del que podríamos decir que está recién salido de la maternidad.
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