Parece que al final China, tras muchas insinuaciones y rumorologías previas, va a poner en marcha un fuerte programa de subvenciones para animar a sus ciudadanos a que compren muchos más coches eléctricos. Estamos hablando de unos 14.000 euros de ayuda por la compra de uno coche de este tipo.
Los nuevos vehículos eléctricos, especialmente los autobuses pueden ayudar a mejorar la contaminación urbana y los problemas del ruido en las ciudades; todo el mundo debería usarlos. El gobierno debe tener una actuación ejemplar. En vista de la creciente contaminación del medio ambiente, tenemos que hacer frente a estos problemas.
Esto es lo que decía el primer ministro chino en un evento público hace escasos días. A diferencia de lo que puede ocurrir en otros países donde subvencionar los eléctricos es más un tema propagandístico que otra cosa, en el país oriental tienen un problema muy serio entre manos y a día de hoy el coche eléctrico es de las pocas cosas que les pueden salvar.
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